Consejos para elegir zapatillas de ciclismo y mejora tu rendimiento

Una buena y adecuada zapatilla de ciclismo nos permitirá tener mejor rendimiento y una pedaleada más eficiente

Si eres ciclista y aún no tienes las zapatillas de ciclismo o deseas cambiar las que tienes, este artículo te ayudará a tomar la mejor decisión.

Realmente no es tan fácil de comprarlas por Internet o ir a una tienda y escoger las que tienen expuestas en las vitrinas, al menos, si lo que quieres es un buen par de zapatillas de ciclismo que se ajusten bien a tu pie y te permitan disfrutar, y no sufrir de una salida en bicicleta de varias horas.

Son muchas las variables que debemos tener en cuenta para la toma de esa decisión tan importante para los ciclistas, se necesita saber ¿qué tipo de zapatillas usar?, el sistema de ajuste, la suela, los refuerzos y los materiales de las zapatillas.

Es claro que  se debe asegura al pedal de alguna forma, y cada zapatilla lo maneja de manera distinta según la disciplina de ciclismo que practiques. No hay nada de malo con cruzar equipo de diferentes tipos de ciclismo (usar cualquier zapatilla para cualquier tipo de especialidad:MTB, Ruta, Triathlon), pero sí algo fue diseñado con un propósito específico, es mejor que lo cumpla.

1. El Tipo de Zapatilla, no todas las zapatillas  son adecuadas para cualquier disciplina. Debes saber que disciplina practicas, para así saber que zapatillas de MTB, Ruta, XC, Triathlon usar.  Al menos,  debes diferenciar entre disciplinas que necesitan mayor anclaje y otras que requieren llevar el pie más suelto. En resumen, podríamos agruparlas en dos grupos generales, aunque con algunas pequeñas diferencias.

Están las zapatillas de anclaje fijo que requieren un anclaje constante, para practicar por ejemplo XC, MTB . En ellas, no solo el anclaje es fijo, sino que por consiguiente, al no estar diseñadas para pisar el suelo (aunque tengan una suela taqueada, por si el caso) suelen tener suelas bastante rígidas y hormas mucho más ajustadas. Son las más parecidas al resto de zapatillas de ciclismo de carretera o cross.

En el otro extremo, estarían las zapatillas de plataforma en las que los pies van sueltos, libres como el aire. En ellas, el anclaje desaparece en disciplinas como el Enduro, o al menos se trata de agarres más que de anclajes, con buena adherencia en el pedal pero que son capaces también de permitir caminar en terrenos dispares. Entre ambas, toda una gama intermedia permite ser más o menos extremo y riguroso a la hora de escoger las zapatillas acordes a tu disciplina.

2. El sistema de ajuste, es el segundo aspecto que se debe de analizar de las zapatillas de ciclismo a adquirir. Sin duda, las ruedas micrométricas han revolucionado todo el proceso de ajuste al pie. Algunas marcas, como SIDI fabrican su propia rueda, pero sin duda hay una que ha copado el mercado: BOA. El sistema de ajuste con BOA es tan sencillo e intuitivo, funcionando en ambos sentidos y soltando la zapatilla con apenas un tirón de la rueda hacia arriba, que se ha impuesto sin lugar a dudas, al menos en todos los modelos de zapatillas de ciclismo de gama media y alta. No es algo imprescindible, pero si te lo puedes permitir, no lo dudes: merece la pena un ajuste tan rápido y preciso. Por supuesto, no es el único sistema: hay velcros y hay cordoneras. El menos aconsejable es la cordonera, aunque su ajuste es bueno, desatar y atar, sobre todo si usas guantes, es una tarea de titanes. Los velcros tienen buen ajuste y muy fácil, pero suelen ir perdiendo propiedades con el tiempo. Si no puedes llegar económicamente a un modelo de zapatilla de ciclismo  con BOA, intenta algún modelo que combine rueda y velcro.

3. La suela y la horma. El tipo de materiales de suela es muy discutido por los ciclistas, con la creencia que la fibra de carbono es la mejor alternativa. La pregunta a veces es incorrecta: la cuestión no es si la suela es de fibra de carbono o de otros materiales como el nylon, sino que lo verdaderamente significativo en una zapatilla de ciclismo es la dureza o rigidez de esta suela. 

Existen suelas que no son de fibra de carbono cuya rigidez es muy próxima a ella, por lo que el valor si podría compensar que pagar por unas de gama alta de fibra. Se considera también que mayor rigidez supone mejor resultado, pero recuerda que depende de las exigencias de cada ciclista y sobre todo de tu disciplina, no es lo mismo un ciclista de solamente fines de semana a otro que entrena entre semana y el fin de semana se exige al máximo, la necesidades son distintas. Así que considera analizar la suela: ¿tiene buen acabado y es cómoda? ¿Tiene buenos tacos que permita buen apoyo sin dañar la cala? ¿es muy flexible o es bastante rígida? Y, lo que es fundamental, ¿la suela se ajusta a una horma estrecha o ancha? Porque hay marcas que fabrican con hormas tan estrechas que a muchos ciclistas sus zapatillas de ciclismo les hacen daño en la parte delantera del pie. La suela no determina completamente la horma, pero influye mucho, pues piensa que para construir la zapatilla de ciclismo, se colocará una horma que encaje y selle perfectamente sobre una suela. Así que observa la suela y prueba la zapatilla que tanto se acomoda a la horma del pie y que tan rígida o flexible es para la transmisión de potencia en cada pedaleada.

4. Los refuerzos y acabados. No hay nada más doloroso que pagar por una zapatilla de ciclismo mucho dinero y que, a las pocas salidas notes que pequeños roces, golpes o arañazos ocasionan daños considerable sobre ella. Esto depende en gran medida de los materiales de su fabricación y de los refuerzos y acabados. Porque fíjate y verás que en tus zapatillas de ciclismo los daños abundan en las mismas partes: puntera sobre todo, talón, y empeines exterior e interior. Así que analiza, sobre todo para disciplinas de mountain bike, si estas partes van bien acabadas y si incluyen refuerzos, añadidos, que hayan considerado su exposición para sobreprotegerlas. Es bueno también que sepas cuándo ha llegado el momento de cambiar las zapatillas.

5 Los materiales son fundamentales. Hasta hace bastantes años, el cuero se consideraba lo máximo de una zapatilla de ciclismo. Actualmente en el mercado se encuentran materiales que superan en gran medida al cuero (piel) natural: transpiran muy bien, se ajustan y amoldan de forma excelente y son centenares de veces menos delicados y más resistentes que los cueros naturales. Las pieles sintéticas incluyen un brillante extra a  las zapatillas de ciclismo, con materiales antiabrasión que son casi irrompibles. También en el interior de la zapatilla de ciclismo: mira si es transpirable, si incluye partes de sujeción del calcetín para evitar que se salgan o resbalen  y si la ventilación de la zapatilla se aprecia buena.